El tema elegido corresponde a una banda de Islandia llamada Sigur Rós y es una de mis preferidas.
El horizonte frío nos besaba las mejillas, se partían las manos de apretadas entre si y el mar mojaba todo.
El alma conocía los dolores pasados y rogaba por paz, lograba mantenernos cohesionados al cuerpo, a la embarcación estábamos condenados.
Se recogía la soga [la tierra firme nos extraña]
Elevando velas [sucia calidez del prado verde]
El viento nos ama [afiatado a sus ramas un árbol]
Partíamos a la muerte [nos recuerda en iniciales]
Los peces no sabían de esa suerte. [la muerte si]
En la hundida noche de sal, viento y soledad, todo nos anuda a las almas y sus hilos dorados, somos la nimiedad hecha carne y miedo.
«Hombre al agua» todos dejan botas en cubierta, nadie olvida su alma, cruza frontera entre el aire, sumergiéndose con la oscuridad turquesa y gélida del mar.
Lo vimos perdiéndose entre «remolinos» feliz, parecía ir a un lugar esperado y buscado por su alma, él no caía al fondo, llegaba a casa.
Había salido hace años, cuando nació y ahora recordó su raíz de arena y mar, podía respirar tan libremente, su alma de humano nos dejó apenas se lanzó a vivir.
¡Cuánta magia! Hace poco que descubrí a Sigur Rós y me parece un descubrimiento genial, transmite tanto… Además, me parece una música muy sensible y diferente a las típicas canciones enlatadas y comerciales que se escuchan por ahí. Gracias por compartirla, esta también es una de mis favoritas.
Besos
No conocemos todos los misterios de la vida… En este, te has sumergido y has encontrado una respuesta.