
Nómade de mates cebados
al aire libre y ciudades
conversadas de tren en tren,
a la hora del frío calor.
Hombre a prueba de tiempo,
de circos y paseos.
Con una guitarra
vas y vuelves a París.
Hasta el Everest en tablón
de pino. Hacedor de puentes
para evitar los ahogos
en ríos metafísicos.
Navegaba en largas frases
sobre lugares que sólo conocía
su héroe, su igual, su hermano,
su orgullo, su mayor carga.