Cuando cae la tarde y desfallece el sol en un banco de nubes abrumador, un hermoso ciclo de colores naranja abre su función.
La carta sinfónica recoge cristales rotos e inicia un sonido de mar, en puntillas danzan entre mezclados sal y brisa, nada más parecido al silencio.
Puedes oler la tarde declarando su partida y ver un granizo de estrellas expandir su tenue luz ante la noche inminente e incipiente.
Esta obra finaliza cuando el sol saca de su sombrero a la luna y después de un beso de luz, deja orquestar una partitura de paz.
Letras cargadas de bellas imágenes de las que emanan serenas y positivas sensaciones. Precioso atardecer… ❤
Excelente entrada mi amigo. Los colores de otoño presentes junto con la poesía hacen un conjunto precioso.
Me encanta. Felicidades.
Un abrazo grande y saludos
Muchas gracias Esperanza, tus comentarios siempre hermosos.
muy bueno
Muchas gracias amigo